miércoles, 5 de mayo de 2010

capitulo 32




Simón tiene miedo. Algo en su interior le dice que las cosas no van a salir como Thiago tiene pensando., que su desea de estar siempre juntos no se verá realizado. Esa noche sueña con su abuela. Está con ellos en la habitación. Señala a Thiago y llora. Luego acaricia a Simón en plan compasión y desaparece. Simón se despierta sobresaltado. Thiago duerme tranquilamente pero él no puede conciliar el sueño. No deja de pensar en el sueño con su abuela. Siente que su suerte está echada, que algo malo va a pasar y que no puede hacer nada para evitarlo. Camina por el departamento desnudo y a oscuras. Se tropieza con una silla, casi se cae, Se sostiene con la mesa. Ahí estaba colocado el retrato que le ha regalado a Thiago sin querer cae y se rompe el cristal aunque sólo por el lado de Thiago. Simón siente un mal pálpito:
--algo malo le va a pasar a Thiago.
Nunca ha sido supersticioso pero eso lo angustia mucho. Cuando se despierta y Simón le cuenta lo que le preocupa, Thiago no le da importancia.
--lo que pasa es que estás sugestionado... Todo saldrá bien... lo tengo bien pensando...
Thiago besa con ternura a Simón y le dice:
--Cuando le diga a mi padre que tienes una enfermedad mortal se pondrá de nuestro lado...
A Simón esa idea no le hace nada de gracia.
--¿crees que se lo tragaran?
--seguro que sí...
--¿y si habla con mis viejos?
--No lo hará... además se supone que te lo han dicho en una revisión en el instituto y que yo me enteré por casualidad y aún no te he dicho... Nadie más lo sabe...
Simón quisiera estar tan seguro como Thiago pero no puede.
--¿y si pregunta en el instituto?
--¿mi viejo? Para nada... Si fuera mi vieja sí pero yo sé cómo hablarle... le diré que no se lo cuente a nadie.
Simón sigue sin estar muy convencido.
--¿y si no volvemos?
Thiago lo acaricia y dice:
--¿y dónde vamos?
Simòn se queda callado. No sabe qué decir. Thiago le sonríe y lo besa.. A Simón su sonrisa lo llena de amor y le da fuerzas para ser positivas
--no debo pensar en nada... solo en tu y yo amándonos..
--así me gusta...
Thiago conecta su celular.
--¿tienes muchas llamadas?
--si... ha ardido...
Simón se muerde las uñas de los nervios mientras Thiago habla con su padre. Éste se nota muy alterado.
--A buenas horas llamas... ¿¿dónde te has metido? ¿Está Simón contigo? Sus padres ya han denunciado la desaparición...
--Yo estoy bien pero él...
Thiago mira sonriendo a su amado mientras pone voz de drama. A Simón toda esa mentira le parece demasiado pero no se le ocurre otra cosa para que no los separen.
--Me enteré de algo bien groso sobre Simón que ni él mismo sabe y menos sus padres... No sé como decírselo... Quiero que tú me jures que dejarás que Simón viva con nosotros si sus padres siguen oponiéndose a nuestra relación...
El hombre está muy alterado.
--hijo... ¿de qué hablas?
--Se está muriendo...
Thiago que hacer un esfuerzo para que no se le escape la risa. Simón está al borde de un infarto. El padre de Thiago no da crédito a lo que le explica su hijo. El hombre está aturdido:
--No sé, le tengo que contar a tu madre...
--No ya sabes cómo es... se enterará todo el mundo... A mi me gustaría que Simón fuera feliz en sus últimos días, que no supiera nada de su enfermedad.
--¿y sus padres?
--Ellos le dieron la espalda yo quiero estar con él...
El hombre no sabe bien como meter a Simón a su casa sin que su esposa sepa esa supuesta verdad así que queda que Thiago volverá a llamar en dos horas. Thiago desconecta su celular y mira sonriente a Simón .
--todo listo... No nos vamos a separar más...
A Simón todo ese plan le parece una locura.
--Mis padres se van a oponer... ¡estarán como locos¡
Thiago está seguro que podrá manejar a su padre:
--una vez vivas con nosotros no permitiré que te echen o nos tendrán que echar a los dos y mis padres nunca me echarían...
A Simón los nervios lo consumen y acaban haciendo el amor para relajarse bien.

El padre de Thiago trata de convencer a su esposa de que acepte que Simón viva con ellos.
--No estás loco... ¡No podemos consentir los caprichos de tu hijo¡
--pero es que se aman...
--¡tienen 18 años¡ ¿qué saben del amor?
El hombre la mira con cariño:
--Lo mismo que nos decían a nosotros y nos defendimos.
--¡ pero esto de ahora es que no tiene sentido¡¡ ¡No me gusta ese Simón ..,. es una mala influencia para su hijo¡
El hombre acaba por confesar el supuesto secreto de su hijo:
--¡se está muriendo¡
La mujer escucha a su marido pero no cree en las palabras de su hijo. Lo conoce demasiado bien pero finge que sí le cree y que acaba convencida.


Thiago recibe la noticia en un rato cuando llama a su padre.
--Simón será bien recibido en nuestra casa...
Thiago alza el puño en señal de victoria aunque disimula su alegría.
--Necesito que me jures porque me muera ahora mismo que vas a luchar porque estemos juntos...
--te lo juro...
A Thiago le brillan los ojos:
--¡gracias papá... eres el mejor...¡ ¡¡en un rato te caemos¡
Simón está a la expectativa.
--¿funcionó?
él mismo ni se lo cree.
--¡te lo dije, te lo dije¡ ¡tienes que confiar más en mi... desde hoy vivirás conmigo para siempre¡
Los jóvenes están entusiasmados. A Simón le parece demasiado bueno para que sea verdad pero se deja contagiar por las ganas de Thiago. En seguida recogen sus cosas. Thiago se va sin mirar atrás. Tiene prisa en dejar ese lugar. Antes de subirse al taxi que los llevará de regreso, Simón mira atrás. Ha sido tan feliz en ese viejo edificio, ha pasado los días más felices de su vida. Confía en que no sean los últimos. Thiago abraza con fuerza a Simón para asegurarle que les espera un brillante futuro juntos.

La madre de Thiago se ha puesto en contacto con la escuela de los chicos y descubre la mentira de su hijo. Enseguida se lo cuenta a su esposo.
--¡te lo dije¡ ¡siempre te dejas engañar¡
--¡los voy a matar¡ --padre.
Los dos están furiosos.
--En el instituto me han dado el teléfono de los padres, ahora lo voy a llamar...
Él está dolido por el engaño de su hijo y se lo piensa hacer pagar:
--¡Y Thiago se va ya mismo a un internado... No se volverán a ver¡

El taxi hace su entrada en la casa. Simón está nervioso. Thiago sonríe.
--bienvenido a tu casa...
Se miran y suspira. Carlota corre a abrazar a su niño. Luego paga el taxi. El padre de Thiago los espera. Simón traga saliva. Thiago le toma de la mano:
--todo saldrá bien.
Y se acercan a ellos. De repente entran en escena los padres de Simón. Ninguno de los dos contaba con eso y se preocupan porque no saben cual es la reacción de ellos.

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